Un lunes chafita.
El lunes, mi mañana se vio muy chafa. Desperté y oh sorpresa, me habían ganado el baño de arriba, por lo cual, bajé a peinarme y lavarme los dientes, pero el baño de abajo es de mi prima, y se estaba bañando, así que perdí tiempo. Ya iba tarde. Llegando al tren, mi tarjeta tenía solo 4 pesos, así que le iba a poner crédito, y la maldita máquina no me aceptaba las monedas, rapido me cambié a la máquina de fichas, pero en lo que hacía el cambio, llego y se fue el tren. Ya eran las 7:30 y seguía en Avila Camacho.
Como 7 minutos despues, ahí venía el tren y lo increible, venía solo un carro, en lugar de dos (WTF). Por supuesto, nadie pudo subir, venia hasta su madre. Otros 7 minutos después, llega el tren y ya. Llego a Juarez, e iba a tomar el pretren. Me subo, pongo mi tarjeta, y mocos, saldo insuficiente. Resulto que la tarjeta inteligente si es inteligente, por que si no transbordas, te cobra los $4.50 en lugar del $2.25 que yo tenía contemplado. Entonces, solo tenía $4 en mi bolsa y una de a diez. Como el pretren no te da cambio ya estaba resignado, pero el chofer me hizo el paro y me cobro solo $4 pesos. Llege al puro madrazo a la escuela. Lo chido fue que el resto del día se puso chido, y eso fue chido. Por eso no me gustan los lunes. Hasta hoy no hay alguna razón por la cual el lunes se chido. La onda son los viernes.